Estarás acostumbrado/a a consumir productos de higiene dental, como pastas y colutorios, que contienen flúor. Hoy en día es lo más habitual y hemos integrado como normal que sea un componente presente en la odontología.
Pero, ¿sabes lo que es el flúor y por qué se utiliza en odontología? Te lo explicamos.
Qué es el flúor
El flúor es un mineral. Se encuentra en la corteza terrestre y está presente en la naturaleza.
Está presente de forma natural en numerosos alimentos; consumirlos hará que aportemos la cantidad necesaria diaria a nuestro organismo:
- Lácteos: leche materna y leche fluorada.
- Frutas y hortalizas: como las naranjas o cebollas.
- Vegetales verdes: como las espinacas o las lechugas.
- Pescados: salmón, sardinas o bacalao.
- Mariscos.
- Carnes: pollo.
- Patatas.
- Presente también en postres: gelatinas.
- Té
En cuanto a la cantidad diaria recomendada, se considera que debería ser de 4mg/día en hombres adultos y 3 mg/día en mujeres.
Pero hay que tener en cuenta que un exceso de flúor puede ser perjudicial y no se recomienda sobrepasar la cantidad de 10 mg al día.
Uso del flúor en odontología
Fue en la década de los años 30 cuando un grupo de investigadores detectaron que las personas que vivían en zonas donde la cantidad presente de flúor en el agua era mayor y las consumían de forma natural, presentaban un índice de dos tercios menos de caries que las que habitaban en zonas donde el agua no era fluorada.
Se ha probado que añadir flúor en los depósitos de agua tiene como consecuencia que los índices de caries bajan.
¿Cómo actúa contra la caries el fluoruro?
El flúor previene la caries de dos maneras:
- Antes incluso de que los dientes hayan erupcionado, el flúor se concentra en los huesos y dientes en desarrollo y fortalece el esmalte.
- Una vez hayan salido y durante toda la vida, endurece el esmalte de los dientes.
Es más, durante todo el día, en la boca se suceden procesos de desmineralización y remineralización de forma natural. En éstos, el flúor mantiene el equilibrio y los compensa:
- Después de comer los ácidos de la saliva ocasionan desmineralización, porque el calcio y el fósforo que se encuentrasn bajo la superficie dental se disuelve.
- En otros momentos provoca lo contrario, repone el calcio y el fósforo, produciendo la remineralización. Así, ayudan a fortalecer los dientes y evita la desmineralización en el siguiente proceso.
Cómo consumir flúor y proteger los dientes
Para asegurar la ingesta recomendada diaria de flúor, es recomendable seguir una indicaciones:
- Consumir de forma habitual alimentos que contengan flúor.
- Hecer una correcta higiene dental dos veces al día con pastas que tengan un porcentaje de flúor.
- Si fuera necesario, enjuagar la boca con colutorios fluorados.
- Cuando el médico o dentista lo consideren necesario, podrán recetar suplementos que contengan flúor, que se suministran en formato de gotas, comprimidos o pastillas.
- Hay casos en los que además de estas medidas habituales y cotidianas, es necesario apoyarlas con la aplicación de flúor en la consulta. Esto es aconsejable en los casos en los que la persona es muy propensa a las caries y, siempre, deberá ser una posibilidad aconsejada por el dentista. La aplicación se realiza en una consulta y se hace de forma directa a los dientes en forma de enjuague, gel o espuma.